viernes, 26 de abril de 2013

SEMANA APASIONADA



Fuiste prisionero de los romanos
por ese mal beso de Judas,
aquel que te traiciono.
Te caíste tres veces y te levantaste,
te azotaron
y te maltrataron.
Llorabas callado.
Te abofetearon y escupieron,
todo por culpa de los hombres,
los que somos pecadores.

Pero el miedo viene de antes:
en la cena ya lo anunciaste.
A pesar de todo lo que te hicieron,
los perdonaste.
Te pusieron como rey,
Cosa que no tenía por qué ocurrir.
Sólo ayudabas a la gente
y las salvaste de su muerte.
Desde el Domingo de Ramos,
en que entraste en tu pueblo,
hasta rezar en el monte
llevaste este sufrimiento
de que Judas algo esconde.
Aquel que te vendió
por treinta monedas
no tenia perdón de Dios,
pero, en cambio, se ahorcó.

Tu madre María sufrió,
pero creyó en ti
y en tu padre Dios.
Tú sabias lo hacías,
por tu Padre diste la vida
sabiendo todo lo que sufrirías.
Como te dijeron:
- Si Tú eres el Salvador, sálvate.
No lo hiciste,
esperaste y sufriste.
Fuiste valiente y bondadoso,
diste tu vida por nosotros.
Te dieron una cruz
y el Cirineo te ayudo.
No tenias culpa de nada,
sólo nos enseñaste a amar
y a creer en los demás.

Esa cruz de madera
te hizo caer.
Te levantaste
y, con todo el dolor,
llegaste al monte de tu crucifixión.
Cuando te crucificaron
y coronaron,
se reían de ti.
Nadie creía en tu Resurrección.
Perdonaste a uno de los ladrones,
crucificado a tu lado.
Tu familia lloraba,
mientras Pedro te negaba.
El cielo oscureció y grito a su Padre
y terminó su dolor.
Murió.

Cuando dieron el permiso de tu sepultura,
te bajaron de la cruz.
A los tres días,
tu sepulcro abierto y tu cuerpo desaparecido.
Tu madre vio
que su hijo
resucitó.

Cuando todo esto pasó,
ellos, arrepentido,s dijeron:
- Era verdad. Él es el Hijo de Dios.

Iris Ruiz Valero

1 comentario:

  1. El maestro Rafael28 de abril de 2013, 4:41

    Con un poco de retraso a la Semana Santa, pero originalísimo este recorrido por la pasíon de Cristo. Me gusta, me gusta...

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